En esta vida hay cosas que uno necesita ver para creer en ellas. Pues bien, eso fue lo que me ocurrió cuando estuve en el Sudeste Asiático con su medio de transporte por antonomasia, y no me refiero a los famosos Tuk-tuk’s, sino a las motos.
Dicen que en Las Vegas todo es posible, pero cuando estuve allí os aseguro que no vi, por ejemplo, a cinco o seis personas (sin casco, claro) subidas en una motocicleta. Pero voy más allá, si soy sincera, nunca imaginé que pudieran transportarse según qué cosas sobre una moto. Y no estoy hablando de personas, precisamente…
Ventiladores, comida, bombonas, cestas, animales o paquetes de todo tipo y dimensiones pueden ser llevados a lomos de una scooter. ¿Qué pasa si uno se atreve a unirse a la marabunta motera? Que aparte de andarse con mil ojos, a diario se encontrará con estampas como las que os muestro a continuación… que darían para ilustrar uno, dos y hasta tres best sellers.
Me gustaría saber qué ocurriría si Pere Navarro les implantese el Permiso por puntos. Creo que desaparecerían las motos de las calles por una buena temporada.
Hola! Soy Patricia, fácilmente me podrás encontrar de ruta por Noruega, haciendo fotos en Seúl o comiendo paella en Ibiza. He viajado a casi 50 países y tachado de la lista algunas aventuras épicas que siempre quise vivir.
[…] Jugarte la vida conduciendo una bici y disfrutar con los transportes locales Lo cierto es que si tenéis poco aprecio por vuestras vidas, disfrutaréis como niños a lomos de […]