¿Qué es un Road trip? Guía con consejos útiles para su organización

Hay muchas maneras de viajar por el mundo, pero quizá una de las que permite aprovechar más el tiempo, realizando un desembolso económico moderado, es mediante el denominado: road trip o viaje en coche.

Pasar nuestras vacaciones sin la necesidad de tener que coger un avión, tren o autobús muchas veces se agradece por una mera cuestión de libertad y flexibilidad. Aunque, como es natural, también cuenta con ciertas desventajas. Una de ellas, por ejemplo, tener que emplear tiempo en llegar hasta según qué destinos y la fatiga que puede generar conducir.

Recientemente he realizado un road trip desde Madrid hasta Atenas. En total han sido más de 5.500 km que me han llevado a atravesar la friolera de ocho países. A consecuencia de este intenso viaje, se me han ocurrido muchas formas para mejorar la logística de un viaje de esta naturaleza y quiero compartirlas contigo, para que seas un viajero inteligente.

A continuación, te cuento qué es un road trip, cuáles son sus puntos fuerte y débiles, y cómo planificarlo con acierto.

¿Qué es un Road trip?

Un Road trip o Viaje en coche es, como bien indica su nombre, un viaje que implica visitar varios destinos diferentes realizando los desplazamientos entre unos y otros puntos señalados en el itinerario por carretera, utilizando para ello un coche alquilado o propio.

Ventajas de hacer un Road trip

• Flexibilidad absoluta: tú y solo tú eres dueño de tu tiempo y lo administras como quieres. Al no depender de horarios de trenes o autobuses, tienes plena libertad para empezar la jornada a la hora que quieras, parar para tomar un baño en esa calita espectacular que se veía desde la ventanilla del coche o seguir hasta la ciudad siguiente porque «esta no me gusta».
• Itinerario más ambicioso, ver más «cosas» en el mismo tiempo: cuando dependes de horarios de otros transportes, tienes que adaptar tu hoja de ruta para no quedarte colgado o que los billetes suban hasta precios astronómicos. Estás limitado, entre otras cosas, a fijar los destinos a visitar con cierta antelación (más que probable, sobre todo si se viaja en verano) y a que estos sean accesibles mediante algún transporte público. Con el coche esperándote a la puerta del alojamiento de turno ese problema no lo tienes.Tener tu propio vehículo para visitar una región o país es una manera excelente de poder conocer lugares que en gran medida tan solo son accesible con transporte propio y de que cunda más el tiempo.Si estás en Ibiza y has odio hablar de tres calas espectaculares, separadas por pocos kilómetros de distancia, puedes llegar hasta ellas (cuidado con los bajos) en una sola jornada. Si entre pueblo y pueblo has oído hablar de la existencia de una ermita recóndita desde la cual se obtienen unas vistas panorámicas de toda la región, puedes parar en ese punto para tomarte un respiro y sacarle rendimiento a tu cámara. Si te han hablado de una bodega en la que te hacen una visita a sus viñedos, con su correspondiente cata, puedes ir sin mayores problemas, aunque hasta ella no llegue el transporte público.
• Flexibilidad para encontrar alojamientos más económicos: este es un factor muy interesante ya que al ser autónomos, podemos dormir en un alojamiento que no esté situado en pleno centro de la ciudad de turno, con el correspondiente ahorro económico que eso suele tener .
• Poder viajar en un plan muy low cost si así desea: ya que tenemos todo el maletero a nuestra disposición, además del equipaje podemos llevar un saco de dormir y una esterilla para ahorrarnos el alojamiento, o ir comprando comida por el camino para prepararnos nuestros propios festines.
• Comprarse souvenirs sin tener que preocuparse por el sobrepeso de la maleta: un jarrón, una botella de vino, un cojín, un jersey de Laponia, un ordenador… cualquier «chisme» que se nos ocurra podremos comprarlo y cargar con él de vuelta a casa sin mayor problema.

Desventajas de hacer un Road trip

• Emplear tiempo hasta llegar a la zona que queremos visitar: muchas veces esa área estará cerca de casa pero puede que muchas otras no. Si está lejos, nos restamos tiempo de nuestras vacaciones metidos dentro del coche, de camino (ida/vuelta) a nuestro «destino final».
• Fatiga por tener que conducir: el hecho de tener que desplazarse en coche propio implica tener que conducir y puede darse el caso que no apetezca. Tras una noche de fiesta o una ruta por el campo podemos estar cansados para ponerse al volante y recorrer otros tantos kilómetros hasta el siguiente destino. Solución: turnarse en la conducción con otros pasajeros.
• Averías y posibles imprevistos: cuando se planifica un viaje hay que ser previsor. En el caso de un road trip no hay que pasar por alto el poder tener una avería a mitad de camino o, esperemos que no sea el caso, sufrir un accidente. Cuando se viaja en transporte público no estamos a salvo de estas engorrosas situaciones (sobre todo de los retrasos varios) pero es cierto que en caso de avería o golpe, el problema no es tuyo directamente.
• Estrés ante atascos o perderse en el camino: por muy bueno que seas interpretando un mapa o las indicaciones de un GPS, perdona que te anticipe que te vas a perder. Cuanto antes lo aceptes, mejor sobrellevarás la situación. Y si no te pierdes, es probable que el dispositivo o aplicación escogido para que te guíe en el viaje decida «meterte» por según que «carreteras»… entonces sí que puede que vivas un pequeño momento de estrés pensando en los bajos de tu coche o en cómo no rallar la carrocería del flamante coche de alquiler con alguna de las piedras que hay en mitad del camino.
• Aparcar el coche: algo obvio que hay que hacer y que muchas veces produce momentos de desesperación. Perder tiempo y gastar gasolina en busca de parking, para terminar haciéndolo dentro de un parking privado en el que la hora te cuesta lo mismo que una comida.
• Posibles multas: todos somos excelentes conductores pero ninguno estamos a salvo de las multas, y cuando conducimos durante muchas horas, a lo largo de muchos kilómetros, las probabilidades de que nos «casquen» una multa aumentan considerablemente, aún queriendo respetar todas las normas de circulación.

Cómo planificar el Road trip perfecto

• Elegir entre usar nuestro coche particular o alquilar uno: difícil decisión y muy personal. El punto sobre el que hay que reflexionar es el lugar que queremos visitar y la distancia a la que nos encontramos. Así podremos determinar con facilidad si compensa emplear el tiempo que tardaríamos en llegar hasta allí y el gasto de gasolina correspondiente, en lugar de coger un avión o algún otro medio de transporte, y alquilar un coche en el destino.

*Ojo, cuando usamos nuestro coche no sólo hacemos un gasto de combustible. También hay que contar con el desgaste de ruedas, posible cambio de aceite, pastillas de frenos, etc.

• Hablar con nuestro seguro de coche y solicitar la Carta verde. Es fundamental conocer las coberturas que tenemos contratadas con nuestro seguro de coche antes de iniciar el viaje para, en caso de ser necesario, ampliarlas. Al igual que es obligatorio tener en nuestro poder la denominada Carta verde.

* La Carta verde, también conocida como la Carta Internacional de los seguros de vehículos de motor, es un documento de seguro suscritos por todos los seguros de un país determinado que acredita que el vehículo está asegurado en países que figuran en el propio documento y que han firmado un acuerdo específico

• Carné de conducir internacional. Si vas a conducir por un país que no es miembro de la Unión Europea y que no ha adoptado el modelo de permiso previsto en los Convenios de Ginebra o Viena, me temo que necesitarás sacarte el Permiso internacional de conducción. Aquí te dejo más info (para españoles).
• Informarse de qué ruta es la más recomendable. Hay veces que decidimos tomar la «ruta más corta» del GPS o guiarnos por el mapa en papel que tenemos en el coche y el resultado es desastroso. Saber con anterioridad el estado de las carreteras y del tipo que son nos puede ahorrar muchos problemas. Recurre a foros en los que la gente haya dado su opinión sobre la ruta que quieres realizar y mira qué camino es el más conveniente.
• Tener en cuenta los peajes: a colación con el punto anterior está el de los dichosos peajes. De pronto vemos como la carretera por la que vamos a transitar a lo largo de 700 km es de peaje y lamentamos no haber mirado previamente posibles alternativas gratuitas, que en ocasiones sí es posible encontrarlas sin duplicar el tiempo estimado de llegada. No hay nada como conocerse la ruta o documentarse antes 😉
• Poner el coche a punto antes de salir: teniendo en cuenta que va a ser nuestro medio de locomoción durante varios días, dejar el coche en el taller para una revisión y puesta a punto debería ser algo a tener en la lista de «Cosas que hacer». La sensación de quedarse tirado en mitad del trayecto por un problema técnico no creo que sea de las mejores.
• Echar gasolina donde sea más barato: mirar el precio del carburante, sobre todo si se van a visitar diferentes países, puede contribuir a ahorrarnos un dinerillo que siempre es bienvenido
• Llevar mirado el alojamiento. Para aprovechar al máximo la libertad que nos otorga viajar en coche, podemos dejar las reservas del alojamiento miradas pero no reservadas, siempre y cuando no estemos en un destino muy turístico o en temporada alta. De esa forma podemos ver hasta dónde avanzamos día a día y trazar el itinerario según las exigencias del momento.

Cosas que podríamos necesitar

• GPS. Hoy en día cuesta imaginar cómo se viajaba hace 20 años, sin una vocecilla que te fuera diciendo «a 300 metros gire a la derecha». El GPS se ha convertido en el compañero casi indispensable de ruta. Es por ello que te recomiendo leas el artículo que escribí sobre Cómo orientarnos en el extranjero con el GPS sin conexión en el móvil.
• Una nevera pequeña: muy útil si se va a viajar de manera económica o para tener algo frío que beber durante los viajes de verano.
• Un saco de dormir y una esterilla. Si queremos abaratar el viaje por completo, podemos optar por la opción de llevarnos nuestro saco de dormir y esterilla para hacer vivac (dormir al aire libre). Es garantía de aventura.
• Música. Vamos a pasar muchas horas en el coche y llegará un momento en el que los temas de conversación tal vez se agoten, o simplemente no apetezca conversar y tan sólo escuchar algo de música. Para ello podemos echar mano de la radio, cd’s o algún dispositivo que se pueda conectar con nuestro equipo de música del coche y nos haga el trayecto mucho más llevadero.

¿A qué esperas para empezar tu propia aventura sobre cuatro ruedas? Si sigues todos los pasos que te acabo de comentar anteriormente, uno por uno, no tiene por qué surgir ningún problema y solo habrá lugar para disfrutar del camino.

Si te ha parecido útil la información que te brindado y conoces a alguien que esté a punto de iniciar su próximo Road trip, comparte el artículo para que no se le olvide ningún detalle 😉