Querido viajero,
Esta vez en lugar de un artículo útil para tu próximo viaje, he creído que era necesario escribirte una carta para contarte mis novedades vitales, que no son pocas, debido a las cuales he tenido que ausentarme del blog de manera temporal… pero tranquilo porque ya estoy de vuelta.
Si me sigues desde hace algún tiempo sabrás que soy una persona inquieta, que por elección se aleja de la rutina y de los trabajos de oficina. El objetivo de todo ello es vivir experiencias nuevas, que me aporten otra perspectiva de las cosas y me hagan crecer profesional y personalmente. Mi meta es que este blog sea mi principal fuente de ingresos a medio plazo, pero hasta que eso suceda tengo que hacer frente a la no siempre halagüeña realidad y tomar cartas en el asunto: trabajar.
No sé si te ocurre lo mismo, pero ahora más que nunca me asombra las vueltas que da la vida y las situaciones que se crean sin que nosotros mismos seamos conscientes, aunque plenamente protagonistas. A veces me paro a pensar en los planes que tenía para mí cuando era pequeña y a continuación una sonrisa se dibuja en mi rostro. Dicen que no hay nada mejor como tener sentido del humor y aprender a reírse de uno mismo, ¿verdad?
Como te decía, mis expectativas eran realmente altas. Más allá de ser hija, hermana, tía, ¿esposa? y amiga… propietaria de una casa con jardín y con un pastor alemán ladrando a todo bicho viviente por mascota, mi sueño era triunfar en lo profesional y, sobre todo, sentirme realizada con aquello a lo que me dedicase. Pero siempre tuve dudas sobre qué profesión escoger, por lo que primero estudié la carrera de Historia del Arte, más tarde cursé un máster en Periodismo deportivo y, por último, me saqué el título para poder ejercer como profesora. Mientras trabajaba como periodista decidí escribir las primeras líneas de Escribe cuando llegues y convertir mi gran pasión en algo más serio.
Lo cierto es que tres años atrás nadie pensaría que a los pocos meses me quedaría sin empleo. Fue entonces cuando tuve que reorientarme o, mejor dicho, reinventarme con el fin de ser capaz de desempeñar nuevas tareas profesionales ajenas a mi formación de manera satisfactoria. Es por ello que cuando no ejerzo activamente como blogger de viajes puedo trabajar de cualquier cosa, sin importar si mi perfil o forma de ser no es el más adecuado para el puesto.
Ejemplo de ello es mi día a día. Hoy por hoy me gano la vida limpiando retretes, así como lo lees (sin paños calientes ;)). Ciertamente no es un trabajo para el cual estaba especialmente capacitada pero la práctica hace al maestro y a día de hoy me siento capaz de, por un lado, limpiar mi casa en una hora en lugar de cuatro y, por otro, trabajar de cualquier cosa. Me siento multidisciplinar y versátil. Capaz de afrontar y superar cualquier reto como el actual porque, querido amigo, si piensas que limpiar en fácil… estás MUY equivocado.
Hay veces que hay que asumir sacrificios en el presente para alcanzar objetivos mayores en el futuro, y en ese punto me encuentro ahora. Nuevos y ambiciosos proyectos viajeros se dejan entrever en el horizonte para los que necesitaré algo de dinero en el bolsillo. Resultaría estúpido renunciar a un trabajo digno y bien pagado por una cuestión de prejuicios, ¿no crees? Por otro lado, mi caso es uno más de los muchos que existen en España y en el resto del mundo. Personas altamente preparadas y cualificadas que tienen que dedicar sus energías y esfuerzos a labores profesionales para las que no se formaron pero por las que SÍ reciben ingresos.
A consecuencia de ello, vuelvo a pasar la temporada en la magnética e increíble isla de Ibiza. Por lo que en breve podrás disfrutar de varios artículos sobre este rinconcito del planeta que parece caído del cielo.
Hasta aquí mis novedades vitales no viajeras que han impedido que estuviéramos en contacto durante las últimas tres semanas. Prometo no tardar tanto en escribir la próxima vez!
Recibe un fuerte abrazo y a continuar viajando.
PD: Seguro que alguna escapada tienes en mente para los próximos días, semanas o meses que se avecinan. ¡Que la disfrutes!
PD 2: Si crees que este texto puede dar un empujoncito a alguien que está a tu alrededor, no dudes en compartirlo… ya sabes, la unión hace la fuerza 😉
Hola! Soy Patricia, fácilmente me podrás encontrar de ruta por Noruega, haciendo fotos en Seúl o comiendo paella en Ibiza. He viajado a casi 50 países y tachado de la lista algunas aventuras épicas que siempre quise vivir.
Me ha gustado mucho cuando dices que gracias a tener que espabilarte, para cumplir tus retos y sueños viajeros, ahora eres mas multidisciplinar y versátil. Cualidades que cuestan adquirir sin tener un objetivo, reto o sueño.
Así uno disfruta mucho mas de todo, es mas autentico, pasan las cosas menos desapercibidas. Se le da a todo mucho mas valor.
Me suscribo a tu blog 😉
Hola! Me encanta tu blog! Me has dado muchas ideas jeje espero q escribas pronto!!
Yo ahora estoy curando 10 horas diarias en hostelería para poder ahorrar y hacer un buen viaje… Es lo que hay… Pero la meta es prometedora. Con este post me has dado muchos ánimos, gracias!
Un abrazo!
No sabes lo feliz que me hace leer estas palabras, Pamela! Es lo bonito de interactuar, que nos retroalimentamos 🙂
Mucho ánimo!!! ya veras como todo el esfuerzo habrá valido la pena 🙂
Un fuerte abrazo!
Patricia