Para la mayoría de personas que habitan en este planeta, viajar se ha convertido en un lujo que no pueden permitirse o al menos no tanto como ellos quisieran. Sin embargo, lo que todos debemos saber es que más allá de las creencias generales, viajar no es caro o no tiene por qué serlo.
Todo depende de tres factores: ¿Cómo?, ¿Cuándo? y ¿Dónde?
Hay varios destinos increíbles repartidos por todo el mundo, que ofrecen la posibilidad de viajar a un precio muy económico, por debajo de los 20 euros al día. A continuación te presento uno de ellos.
El Sudeste Asiático sin duda es el rey de los viajes con un presupuesto ajustado. Países como Tailandia, Camboya, Filipinas, Sri Lanka o Laos permiten ahorrar mucho dinero y disfrutar de unos paisajes y gastronomía increíbles.
Para conseguir precios ajustados tenemos que salirnos de las rutas comerciales. La ventaja de hacer turismo de esta manera es que aparte de ahorrar dinero, conoceremos la cara más auténtica del país.
En la mayoría de destinos del Sudeste Asiático, alquilar una habitación cuesta entre 4 y 8 € la noche (de 6 a 10 USD). Si se comparte habitación, los precios serán más económicos.
La ventaja de viajar por Asia es que los puestos callejeros de comida están a la orden del día. Comer en uno de ellos te puede costar desde 0,50 € hasta los 4 € (0,80-6 USD) y las bebidas entre 0,50-1,50 € (0,80-2 USD).
Realizar una actividad turística puede ser lo que más haga disminuir nuestro presupuesto, pero siempre encontraremos alguna excursión que no supere los 10 € (14 USD).
Otro factor importante es el transporte. La mejor opción es moverse utilizando la red de transportes locales: autobuses, trenes, tuk-tuks, barcos, minivans… y dejar a un lado los transportes de primerísima clases que suelen utilizar los turistas que viajan en un tour organizado. Usar los transportes locales es mucho más divertido y económico, aunque probablemente más incómodo.
Por tanto, viajar no es solo para ricos. Como hemos visto, vivir en alguno de los países del Sudeste Asiático por 20 euros al día es posible, siempre y cuando se duerma en guesthouses, se coma deliciosa comida local en cualquiera de los miles de los puestos callejeros que hay por todas partes y huyamos de los enclaves turísticos más demandados, donde es probable que los precios sean parecidos a los de los países occidentales.
El único gran inconveniente de viajar por el Sudeste Asiático es llegar hasta él. El precio de los vuelos desde nuestros país de origen hasta Asia eleva el presupuesto de nuestro viaje, pero siempre hay técnicas que ya explicaré en otro artículo para evitar pagar cifras desorbitadas por nuestros vuelos.
Por tanto, si intentamos ahorrar al máximo en los billetes de avión y pagamos 20 euros al día mientras estamos de vacaciones, ¿el Sudeste Asiático no se convierte en una grandísima opción vacacional?
Hola! Soy Patricia, fácilmente me podrás encontrar de ruta por Noruega, haciendo fotos en Seúl o comiendo paella en Ibiza. He viajado a casi 50 países y tachado de la lista algunas aventuras épicas que siempre quise vivir.
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