De mis dos visitas a Asia he sacado varias conclusiones. Dos de las más importantes son que se pueden hacer actividades imposibles de realizar en ningún otro continente del mundo y que normalmente se pueden llevar a cabo por poco dinero.
Al planear nuestro próximo viaje, una de las primeras cosas que solemos hacer es buscar información acerca de actividades típicas del sitio al que vamos a ir que tengan cierto encanto, ya sea desde el punto de vista cultural, deportivo, gastronómico, etc. Asia es el continente perfecto para poner a prueba nuestros cinco sentidos. Si no os lo creéis, echar un vistazo al listado de cosas que se pueden hacer en alguno de sus países con un presupuesto ajustado:
Subirse a un tren en Moscú, atravesar Siberia y llegar a Asia sin coger un solo avión, tras recorrer más de 10.000 kilómetros sobre raíles y pasar casi 200 horas metidos dentro de un vagón. Es una de las mayores aventuras que se pueden experimentar viajando.
Los aficionados al Singstar o a desgañitarse en la ducha están de enhorabuena porque en algunos países como Corea del Sur, Japón o Tailandia encontrarán muchos locales en los que poder dar rienda suelta a esta pasión. Lo habitual es alquilar una habitación privada por un tiempo determinado y cantar hasta dejarse la garganta si el bolsillo lo permite.
Cuando cae la noche en Gion Corner, una conocida zona de la ciudad cultural de Japón, las famosas y tradicionales geishas salen a la calle a toda prisa en busca de un taxi que las lleve a sus respectivos destinos. Es una interesante actividad para hacer cámara en mano pero no siempre es posible verlas. ¡Suerte!
El país conocido por el «MADE IN…» es un pulmón verde repleto de atractivos naturales. Uno de sus parques más espectaculares se llama Taroko. Allí se puede dormir en una pequeña iglesia situada en mitad de la selva o en una cabaña aledaña. Experiencia religiosa para algunos y genuina para todos.
A los amantes del agua Filipinas será un país que les gustará por su variada oferta. Allí podrán hacer snorkel en playas de coral, buceo y nadar con el tiburón ballena, el mamífero más grande del planeta que en ocasiones puede llegar a alcanzar los 20 metros de longitud. Pero no temáis, a pesar de su colosal tamaño, es inofensivo. Dousol o Cebu son dos de los destinos en los que poder hacerlo. Yo no conseguí verlo a pesar de los dos intentos fallidos, tendré que probar suerte en Tailandia.
Si los animales son tu pasión, Tailandia brinda la oportunidad de estar en contacto con algunos de los seres vivos más maravillosos de la tierra, y cuando hablo de «estar en contacto» me refiero a subirse a lomos de un elefante, tumbarse encima de un tigre o abrazarse a un mono. Chiang Mai, al norte del país, ofrece muchas excursiones durante las que poder hacer fotografías memorables como ésta 😉
Por desinformación, formé parte de este espectáculo para turistas en los que se utilizan a animales salvajes sin voluntad, vulnerando sus derechos. De haberlo sabido entonces, nunca hubiera formado parte de este circo.
Si tus papilas gustativas adoran la comida picante y tienes curiosidad por comer según qué cosas, Asia es tu destino. Aquí podrás probar todo tipo de insectos como: cucarachas, saltamontes, escorpiones, lombrices o arañas. Además, tendrás la oportunidad de enamorarte u odiar la comida picante. Todo un reto que podrás experimentar en buena parte del continente. ¿Te atreves?
La isla de Borneo es el lugar ideal para aventureros con ganas de saber qué se siente al estar en la jungla. Allí se pueden ver cocodrilos, monos, pájaros de todo tipo y orangutanes en la Reserva de Sepilok, una de las pocas que existen en el mundo.
Lo cierto es que si tenéis poco aprecio por vuestras vidas, disfrutaréis como niños a lomos de un tuk tuk, una moto con otros tres o cuatro pasajeros, o conduciendo vuestra propia bici y poniendo a prueba vuestra pericia y equilibrio. Sino vais a Vietnam no os preocupéis porque podréis hacerlo en cualquier país del sudeste asiático.
Hola! Soy Patricia, fácilmente me podrás encontrar de ruta por Noruega, haciendo fotos en Seúl o comiendo paella en Ibiza. He viajado a casi 50 países y tachado de la lista algunas aventuras épicas que siempre quise vivir.
Un apunte, los tiburones ballena no son los mamíferos más grandes del planeta. De hecho no son ni mamíferos, son tiburones, es decir, peces. El mamífero más grande, y animal en general, es la ballena azul.
Enhorabuena por el blog!
Por suerte algunas de ellas ya he podido vivirlas, otras tendré que esperar… aunque en un solo país es difícil decidir qué es lo mejor que hacer… porque hay tantas cosas maravillosas que experimentar…
Felicidades por el blog y espero seguir leyendo más aventuras!
Exacto Pablo, hay tantas y tantas cosas por vivir… pero tranquilo porque habrá tiempo para ello! Pero, por si acaso, empecemos cuanto antes 😉
Gracias por tu comentario! Por suerte, en Europa, cerquita de casa, también hay cientos de aventuras que nos esperan! 🙂
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