Enclavado a los pies de la Acrópolis, en el extremo oeste de la colina sagrada, se encuentra el Odeón de Herodes Ático (Ωδείο του Ηρώδη του Αττικού). Un teatro concebido en el año 161 d.C. para la celebración de audiciones musicales. El Irodio, como también es conocido, fue construido por el cónsul romano Herodes el Ático, tras la muerte de su esposa, un año antes.
El odeón se construyó en el siglo II d.C. bajo las órdenes de Tiberio Claudio Herodes Ático, un maestro y filósofo de la época que empleó parte de la fortuna que heredó de su padre para levantar el Odeón de Herodes Ático en memoria de su esposa fallecida, Riguila.
En origen, era un teatro semicircular con un techado de madera de cedro, lo cual supone una novedad en los teatros de la época. Su estructura sigue las directrices del típico teatro romano, con una gradería apoyada sobre una bóveda de hormigón y una orquesta semicircular en lugar de circular (típica de los teatros griegos), entre otras características.
El Odeón fue destruido en el año 267 durante la invasión de los Hérulos (una tribu germánica, de Escandinavia, que invadió el Imperio romano en el siglo III). El teatro no fue reconstruido hasta que entre los años 1952 y 1953 se iniciaron las labores de excavación por la Sociedad Arqueológica. El edificio fue completamente restaurado y a partir de 1957 recuperó su actividad como teatro en activo.
En la actualidad, este edificio se encuentra en un excelente estado de conservación. Es por ello que sigue utilizándose durante el período estival (desde el 1 de junio hasta finales de septiembre) para celebrar en su interior el Festival Helénico y Epidaurus. Cada verano, importantes óperas y representaciones teatrales tienen cabida dentro del odeón, deleitando a todos los amantes de la cultura clásica y del arte a vivir un momento especial dentro de sus paredes milenarias.
Desde hace más de 50 años se celebra este festival en el que actuaron artistas tan importantes como María Callas o Luciano Pavarotti. Además de los 5.000 espectadores que se congregan cada noche de función en el Odeón de Herodes Ático, existe otra importante oferta cultural en Grecia. En el Teatro de Epidauro (Peloponeso), también tienen lugar representaciones teatrales durante el verano, pero esta vez la temática de las mismas está más centrada en las grandes obras clásicas griegas.
Cualquiera de los dos escenarios, ya sea el Odeón de Herodes Ático o el Teatro de Epidauro, son lugares con una magia singular. El disfrute está asegurado.
El Odeón se encuentra dentro del recinto arqueológico de la Acrópolis de Atenas. Si quieres visitarlo, primero tendrás que comprar la entrada en taquilla. Tiene dos accesos: el norte, más cerca de las estaciones de metro de Monastiraki y Thissio (de 10 a 15 minutos andando); y el sur a menos de 200 metros de la salida de metro de Akropoli. Si entras por el primero, da unos cuantos pasos a tu derecha y te lo encontrarás de frente, a tus pies.
En el mapa de abajo (que puedes descargarte) te propongo un recorrido guiado por el recinto arqueológico completo, en el cual está incluido el Odeón de Herodes Ático 3.
Puedes usar la opción «cómo llegar» del mapa inferior para ver cuál es la mejor opción desde tu ubicación:
Entrada originalmente publicada el 23 de noviembre de 2015. Última actualización: 18 de noviembre de 2017
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